En 1883, la compañía Singer estableció una pequeña fundición de hierro y un edificio de ensamblaje en Floridsdorf, cerca de Viena, Austria. Esta decisión se tomó en respuesta a un impuesto aplicado a los soportes de máquinas de coser importadas en 1882. El impuesto se basaba en el peso, por lo que tenía sentido fabricar localmente los pesados soportes de hierro fundido de baja tecnología, mientras que aún se importaban las piezas más ligeras y técnicamente más desafiantes de la fábrica de Glasgow.
La fundición de Floridsdorf se construyó según las especificaciones preparadas por la fábrica de Glasgow. Se equipó para producir 1200 soportes por semana. Inicialmente, se descubrió que el hierro austriaco era un poco blando, por lo que después de un trabajo de desarrollo, se decidió agregar una pequeña cantidad de hierro de Glasgow al hierro austriaco más blando.
La fábrica de Floridsdorf estaba destinada a atender los mercados de Europa Central de Austria, Baviera, Bohemia, Hungría y Prusia.
Se sabe poco sobre la fábrica de Floridsdorf, así que si alguien tiene información más detallada, nos complacería escucharla.